El puerto de Batabanó, un lugar al que hay que ir.

El pasado 16 de marzo, tuvimos la oportunidad de llegar al Puerto de Batabanó. Allí compartimos con varios trabajadores y nos comentaron sus principales inquietudes y problemáticas que les aquejan y lo más importante, ofrecieron las posibles soluciones o al menos el camino que hay que transitar para solucionarlos.

Fue impresionante observar como el colectivo es unido y se complementa como buena familia marítima que es, aún ante el futuro incierto que se vaticina en cuanto a algunos asuntos. La resiliencia del personal de la empresa pone a prueba cualquier tarea que se les encomiende; en especial, aquella capacidad que muestran sus féminas desde su terreno de acción, así como viven con la pasión que caracteriza a las mujeres cubanas: Belkis Rodríguez Páez (clasificadora de carga) aspira a validarse en el trabajo con montacargas; Odissey Morales García (controladora de carga en tránsito); Loreta Chacón Quintero (inspectora de faltas y averías) y Dominica Perea Contreras (expedidora de documentos) desde su espacio y enfrentado los avatares diarios se desempeñan a plenitud como mujeres portuarias y están en la empresa hasta que el proceso de carga o descarga termina y lo mejor, lo hacen todo con una sonrisa en su rostro.

Nos comentaron sobre los embates del último ciclón y de cómo el agua de mar le llegó hasta el pecho dentro de sus casas, pero nada los amilanó. Su director, Arístides Feraudys Freinoso -quien en ese momento era Vicepresidente de la Asamblea- tocó de cerca la tarea de proceder al proceso de descarga y distribución de colchones para los afectados (fueron entregados un total de 600 colchones, de forma gratuita a los vulnerables y por un precio módico al resto de la población).

Estas bellas personas entregan cada día brindan un poco más de sí, para convertir Batabanó y la Isla de la Juventud en zonas añoradas por quienes las dejan detrás buscando otros proyectos de vida y el mejor rinconcito de la tierra para el que la habita cada día. Para ellos, nuestro respeto y admiración por creer en una Cuba mejor.